Mis decálogos

#sermujer

IMG_20151017_111354260 Un buen amigo me pidió que hablara unos minutos con trescientas mujeres de los slums de Bombay sobre qué es #sermujer. Cuando puse los pies en India lo primero que vi fueron saris de mil colores picando carreteras a cincuenta grados, descalzas con cestos de arena en los andamios, caminando kilómetros en chanclas, bajando la cabeza tantas veces. Vi mujeres preciosas; a su lado las europeas resultamos desteñidas. Pensé que da igual rica o pobre, famosa o anónima, de aquí y de allá, hay algo en nosotras que nos impide florecer sin culpas, una especie de ¿quién soy yo para hacer esto?, porque guardamos en las células siglos de ¿quién eres tú para hacer esto?. Les conté que mi abuela fue muy pobre y jamás pensó que llegara a tener una nieta que iba a estudiar, a viajar sola, a contar a otras mujeres al otro lado del mundo que tal vez ellas no pudieron, pero sus hijas podrían. Que a  veces son los que más amamos quienes nos miran con ese ¿quién eres tú para hacer esto?. Por eso  las mujeres del slum,  que cosían ropa, tendrían que seguir tejiendo esa red de autoayuda: para decirse las unas a las otras que se puede. Para llorar juntas cuando castren sus sueños. Para ser una misma sin pena ni castigo, sin esconderse. Para ser más fuerte. Para sobrevivir. Para vencer.

Una herida es también un lugar para vivir (#JoanMargarit)

IMG_20170831_063917_360 Se puede vivir en una herida, dice el poeta.
Cada vez más me pregunto si la felicidad no será un hueco en la grieta, una que uno mismo encuentra y adorna. Dejar al azar algo tan delicado como la alegría… es de tontos: nos pasan las cosas que nos pasan, sin un guión que escriba la razón.

Por si  acampas lejos de una vida perfecta, recuerda  las palabras del poeta: Una herida es también un lugar donde vivir.

Donde no puedas amar no te detengas.

IMG_20180216_070050_925 Fue amor a primera vista, la camiseta. Y cuando es amor da igual el precio, el momento o la conveniencia. El amor. Tal vez vengamos a este mundo con un capital inicial de energía emocional limitado, y nuestra felicidad dependa de una buena gestión. Tal vez nos debamos una buena inversión que conlleve abandonar sin miramientos aquellas cosas que arrojan pérdidas y las prácticas que nos generan infelicidad. Tal vez la esencial muestra de amor sea con nosotros mismos, y dónde, quién y en qué cosa ponemos el corazón, nuestro principal activo: cada cual valora su porcentaje de riesgo. Por eso la camiseta y la frase de #FridaKhalo. Hay tantas personas, libros, viajes, amigos, ideas, proyectos, bailes, sonrisas, esperanzas,  besos, palabras y causas que necesitan de toda tu fuerza y pasión, que solo a ti te corresponde la elección. En todo ese amor que tienes dentro, tú mandas y caminas. Pero, por favor: donde no puedas amar no te detengas.

Donde la imaginación te lleve.

IMG_20180208_065713_919 Cruzaba la Plaza del Pilar y escuché esta hoja que gritaba socorro desde el suelo. Ayúdame, me dijo, estoy atrapada. La cogí, el cierzo soplaba fuerte y voló alto al país de #nuncajamás. Ando por la vida poniendo voces a los árboles, las hojas y los ríos, y me pregunto si estaré loca o si resulta que soy poeta. Tal vez las dos cosas, es difícil la cordura en un mundo que la pierde a diario: para eso nos sirve la imaginación. Para sobrevivir y ponerle colores a un lienzo sucio de borrones: díselo a  las hojas que veas atrapadas, a los que huyen por salvar la vida mientras el mundo mira a otro lado, a las mujeres que viven de que les escupan jadeos, díselo a los que luchan sin resultado y a los que ya no tienen más remedio. Cuando ya no sepas qué decir,  diles que agarren el viento y por un momento sin tiempo vuelen alto donde la imaginación les lleve.

Somos los #Reyes de nuestro mundo.

IMG_20180202_063154_647 Por fin encontré mi trono de árbol, hierba y agua, en uno de mis paseos por la ribera. Me senté con dignidad… como si esta silla me hubiese estado esperando desde siempre, y recordé los versos de Henley, Invictus: «soy el maestro de mi destino, el capitán de mi alma». Cada uno de nosotros somos un ecosistema genético único, un pequeño universo que requiere gobernanza e inteligencia para moverse de la mejor manera posible en este viaje. Por ello, todos deberíamos tener un salón del trono desde el que gobernemos nuestro mundo: un lugar donde sentarnos y tomar decisiones, perdonarnos, declarar la guerra a lo que nos hace infelices, abolir preocupaciones tontas, donde retirarnos y ordenar que se alcen los muros que protegen el silencio. Donde ningún enemigo adivine debilidades y repensemos con reposo nuestras fronteras, donde el amor invente excepciones a leyes que la razón escribió. Donde seamos los #Reyes de nuestro Yo.